Una segunda vida a los envases, para acabar con la epidemia del plástico

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Una segunda vida a los envases, para acabar con la epidemia del plástico

 Una segunda vida a los envases, para acabar con la epidemia del plástico

En México el consumo de PET (tereftalato de polietileno) es de aproximadamente 722 mil toneladas al año. Hoy en día es el segundo consumidor de envases —hechos con este material—  para refrescos, y el primero para agua embotellada en el mundo. Pero el incremento de su consumo no es exclusivo del país. Expertos comentan que la producción mundial de PET se multiplicó por 20 entre 1964 y 2014, y esperan que antes de 2050 se alcancen 1,120 millones de toneladas.

Las cifras de esta epidemia son alarmantes, ya que si no se comienzan a implementar medidas que contrarresten el impacto de este material en el medio ambiente, se prevé que para el 2050 éstos acaben en el mar y ocupen mayor espacio que el de los peces que viven en él, puesto que tardan 450 años en degradarse.

México, a pesar del gran consumo, es líder en la región en el reciclaje, ya que reutiliza el 50% de plástico al contar con 14 centros de recolección de envases. Sin embargo, según datos del informe del Medio Ambiente de la Semarnat (Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales), estos espacios para desechar el PET cada día se reducen y son más escasos. Por esta razón, los avances tecnológicos y la aplicación de la economía circular —un sistema que consiste en el aprovechamiento de los recursos y la reutilización de los elementos— aumenta entre las sociedades y compañías a nivel global. 

Un ejemplo de la aplicación de este concepto es el de Veolia, referencia internacional en el manejo eficiente del agua, residuos y energía, la cual a través de la recolección y clasificación de residuos hasta su transformación, ofrece una alternativa para evitar el uso de las materias vírgenes, que son todas aquellas que no han sido procesadas como los árboles, minerales, petróleo crudo, entre otros. Esto sucede, en AKG, una plataforma de transformación del plástico ubicada en los Países Bajos donde se produce polipropileno de una calidad equivalente al plástico virgen; o también podemos hablar de la planta de transformación en Dagenham, en la que se recicla el 100% de las botellas de polietileno de alta densidad (PEHD), natural del Reino Unido, a través del uso de las últimas tecnologías para producir una calidad similar a la del material plástico en su estado virgen.

Es importante que a través de acciones conjuntas, así como de la implementación de nuevas tecnologías, se pueda reducir el impacto de los plásticos al medio ambiente y así preservar nuestro planeta para futuras generaciones.  

 



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